De nuevo en el lío

Puerto de Cambrils, agosto de 2012.

Estas semanas de vacaciones me han servido para desconectar casi completamente del trabajo e incluso, tras unos días de "mono", de las redes de comunicación. Algunos podrían decir que han sido unas vacaciones aburridas, pues no he hecho nada más que dormir, pasear, tomar el sol y, sobre todo, leer. Pero a mí me ha comportado un descanso mental considerable. He acabado unos cuantos libros, incluso esos que no se me ocurriría leer jamás cuando el tiempo es tan valioso.

Sin embargo, no me he relajado en cuanto a los entrenamientos se refiere. Después de la Isostar Desert Marathon me tomé 6 días de descanso y al séptimo empecé a correr en días alternos, entre 10 y 15 kilómetros. Los días que estuve en Euskadi fueron muy agradables a este respecto, puesto que la meteorología es allí más benigna para este propósito. Sin embargo, la segunda parte de las vacaciones las pasé, como es habitual, en Cambrils, donde además de la humedad, las olas de calor africano no nos han dado tregua este mes de agosto. Por ese motivo la mejor opción para mí ha sido levantarme a las 7 de la mañana para salir a correr. De esta manera he evitado las horas de más calor y además el entrenamiento no ha interferido con las rutinas familiares. Y muchos deben de pensarlo también así porque, como os he explicado alguna vez, la cantidad de gente que te encuentras corriendo o yendo en bicicleta a esas horas por el Paseo Marítimo es bastante considerable.

Salida Maratón de Valencia 2011.

Como os conté en mi anterior entrada, tengo ya programados los objetivos atléticos hasta final de año, siendo el más importante el maratón de Valencia el próximo18 de noviembre, al que ya me inscribí antes de la subida de precio de finales de julio. Así que me encuentro de nuevo en el lío, inmersa ya en el plan de entrenamiento para maratón desde la tercera semana de agosto. Durante el tiempo que llevo corriendo, han llegado a mis manos varios planes de entrenamiento para maratón, procedentes de diversas fuentes. He experimentado con algunos de ellos y he podido ver que en realidad son muy diferentes los unos de los otros. Algunos inciden el alto kilometraje, otros en la velocidad. Así que esta vez me ha llevado algún tiempo decidirme por uno de ellos. Serán muchas las semanas invertidas para conseguir un objetivo (en mi caso, bajar de 3 h 30 min) y no puedo hacer un maratón todos los días, así que creo que este primer paso es fundamental. Pero, aunque la decisión final la he tomado yo, no he estado sola en este proceso. Tengo que agradecerle a Dani, gran corredor y muchas veces consejero atlético personal, que me facilitara un plan de entrenamiento diseñado por Roger Roca. Este mismo plan, adaptado a finalizar el maratón en menos de tres horas, es el que ha seguido Jordi con gran éxito en el maratón de Madrid. Lo podéis encontrar en este enlace. Los ritmos R1 (lento), R2 (medio) y R3 (rápido) a los que estoy corriendo son: R1: 5:20-5:30 min/km; R2: 4:50-5:00 min/km;  y R3: 4:25-4:35 min/km.

De momento estoy muy animada, pues todas las sesiones, incluyendo las de velocidad, están saliendo según lo planeado. Este próximo domingo correré la Cursa de Cervera, de 10 kilómetros, que me servirá para calibrar mi capacidad de esfuerzo en velocidad. Aunque han cambiado el circuito, mi objetivo sería como mínimo igualar  mi tiempo en esta misma carrera el año pasado: 47 min. No las tengo todas conmigo...

¡Ya os contaré!