Medio maratón de Balaguer, aún desde la barrera

Mizuno Wave Precision

Ya hace dos semanas que empecé a correr de nuevo, aunque aún arrastro molestias en la rodilla. Suelo salir a entrenar día sí y día no, y corro todo lo que puedo hasta que la rodilla se queja, lo que suele ser alrededor de los 8 ó 10 kilómetros, dependiendo del día. Hoy, sin embargo, he conseguido hacer 12 km, así que parece que la cosa va progresando. Noto que he perdido muchísima forma física, y el ritmo de entrenamiento está ahora entre 5:20 y 5:25 min/km. Compré una cinta rotuliana y siempre salgo a correr con ella. No sé si es de mucha utilidad, pero seguro que mal no debe de hacer y además me sirve de ayuda psicológica... Sigo también con las rutinas de estiramientos, que las realizo dos veces al día. El fisioterapeuta ya me deshaució hace una semana, es decir, me dijo que no volviera más, pues parece ser que la lesión ha de ir curándose sola, con tiempo y paciencia. La podóloga me ha retocado dos veces las plantillas y me ha dicho que compre unas zapatillas nuevas, pues las que tengo ya están bastante desgastadas. Eso he hecho, y me he decidido por las mismas que ya tengo: unas Mizuno Wave Precision. Son unas zapatillas muy ligeras y con buena amortiguación, adecuadas para mi peso (menos de 55 kg), aunque lo mejor de ellas es que son comodísimas y se adaptan al pie como un guante.

http://www.antena3.com/programas/el-hormiguero/

En cuanto al estado de ánimo, depende del momento, y va variando entre desanimada, resignada y moderadamente optimista. El otro día oí en la televisión que existe una receta para ser feliz. Se trata de un ejercicio mental que consiste en echar inmediatamente fuera de la cabeza cualquier pensamiento negativo que nos sobrevenga durante el día. Hay que repetir el ejercicio durante 7 días, con honestidad, sin trampas, pues si se falla habría que empezar a contar otra vez desde el principio. A partir de la semana, el cuerpo lo asume como una rutina y ya se convierte en un acto reflejo involuntario. Sería algo así como la necesidad de lavarse los dientes después de comer. La cosa no parece tan fácil, de hecho la persona que lo contaba sólo lo había conseguido hacer 5 días seguidos. Aquí os dejo el enlace por si queréis pasar un buen rato.

Gran tiempo, el dorsal número 1 le dio suerte

Mientras yo me encuentro en este estado de latencia, el mundo del corredor popular no para, y las carreras se van sucediendo una tras otra. Este domingo ha sido el medio maratón de Balaguer, carrera que corrí el año pasado y donde conseguí mi mejor marca en esa distancia con 1 h 39 min. Aunque este año no he podido participar, quise ir igualmente, cámara de fotos en mano, para vivir el ambiente y acompañar a mi media naranja. Ahí anda él entrenando intensivamente 5 días a la semana para el maratón de Madrid, y esta carrera le iba a servir como test antes de la cita de finales de Abril. Así que esta mañana de sol nos hemos dirigido a Balaguer donde, entre los casi 700 participantes, hemos encontrado a muchos compañeros del club que corrían o bien el medio maratón o la carrera de 10 km que se celebraba conjuntamente. También había carreras infantiles, pero esta vez mis vástagos no han querido acompañarnos. No se me ha hecho larga la espera, en compañía de amigos y haciendo un reportaje fotográfico de la salida y llegada de todos mis compañeros. Esperaba a Jordi alrededor de 1 h 23 min, que es su mejor marca en medio maratón, pero cuál ha sido mi sorpresa cuando dos minutos antes le he visto acercarse al arco de llegada. Con 1 h 21 min ha conseguido su mejor marca personal y un billete para su próximo reto: bajar de las 3 horas en MAPOMA.

Un gran ambiente en un día muy agradable. Esta lesión me está haciendo vivir el running de otra manera. Quizá también me hacía falta. Y para la semana que viene tengo una sorpresa gracias a la amiga Estefi.
¡Ya os contaré!